Reproducimos íntegramente el comunicado emitido por el sindicato Unión Sindical Obrera (USO).
"Alrededor de 85.000 trabajadores de contact center están llamados a secundar la huelga estatal convocada por USO del 13 y 14 de abril. El convenio de empresas de contact center se lleva negociando desde enero de 2020, sin ningún avance significativo, y con los sueldos sin actualizarse desde 2020. “Son ya 27 meses de negociación con propuestas de la patronal que suponen un claro recorte de derechos y empeoran las condiciones de trabajo. Si no se establecen unas condiciones laborales dignas en convenio, pasaremos de ser un sector con malas condiciones a un sector hundido en la precariedad”, reflexiona David Sánchez, responsable del sector en USO.
Entre las propuestas patronales destacan límites temporales en los que los trabajadores no se pueden acoger a excedencias especiales; congelación salarial para 2020; incremento de salario del 0,8 % para 2021, del 2,5 % para 2022 y del IPC + 0,5 % con un tope del 2,5 %; reducción de los complementos de incapacidad temporal y limitaciones en los permisos retribuidos, entre otros.
Por parte de USO se solicita una actualización de los salarios del 2021 en función del IPC (6,5 %) y el abono inmediato de un adelanto mínimo del 2% para 2022; el establecimiento de una cláusula de subrogación y límites a la contratación por ETT; la disminución de la contratación de carácter temporal, mejoras en materia de prevención y el establecimiento de la jornada completa como jornada principal.
Desde USO denunciamos que los trabajadores de contact center soportan una pérdida salarial acumulada desde anteriores convenios superior al 10 %. Además, desde el comienzo de la pandemia, la mayor parte de las plantillas prestan trabajo a distancia sin que se abonen gastos.
“Al inicio de la pandemia fuimos servicios esenciales, atendiendo servicios como el 112, 010, Salud Responde, emergencias, transportes, averías telefónicas, de gas o de electricidad, servicios bancarios, de las Administraciones públicas, etc., pero nuestras condiciones laborales eran y siguen siendo de segunda”, critica Sánchez.
El sector de contact center, da trabajo a 85.000 personas en toda España, es un sector fuertemente feminizado. Un 72 % son mujeres y, mayoritariamente, con jornadas parciales (70 %).
Las plantillas sufren una alta exposición a los riesgos psicosociales (estrés, ansiedad, exceso de carga de trabajo), a lo que se suma la incertidumbre con respecto al cambio de los servicios cuando lo adquiere otra empresa, pues no se garantiza la subrogación de los trabajadores ni el mantenimiento de los puestos de trabajo".