En el distrito tecnológico de Barcelona, Facebook intentará combatir las “fake news” con la subcontratación de los servicios de Competence CallCenter (CCC) en ocho plantas en la Torre Agbar, creando unos 500 empleos. Dicha decisión la toma la compañía después de la puesta en marcha de unas oficinas similares en Alemania.
Os dejamos el link de dicha compañía por si queréis optar a algún puesto ofertado (https://www.yourccc.com/en/careerlocations/barcelona/). En el enlace se detallan las ofertas de empleo (community managers, psicólogos, reclutadores, recursos humanos, jefes de equipo...) y las cantidades a percibir. Es importante el conocimiento de idiomas, ya que gracias a este factor se ofrece más remuneración salarial. Los trabajadores de lengua castellana, portuguesa o italiana cobrarán 24.000 euros, 25.000 euros los del francés y 30.000 euros los que dominen el idioma noruego, holandés y danés. Pero para todos se garantiza “un esquema de compensaciones por encima del mercado con altamente atractivos bonos y extras” (seguro de salud privado, entorno agradable, pausas para comidas…).
La intención de la compañía es cerrar la puerta a informaciones inciertas o falsas. Pero la pregunta que nos surge es si realmente es posible el control de las “fake news”.
Analicemos un poco en detalle la cuestión. Las redes sociales permiten la democratización de la información, dando una libertad a los ciudadanos, para difundir contenidos, que antes era más complicada de encontrar. El problema es que esas opiniones y esa información no siempre está refutada o contrastada.
Facebook con estas medidas está intentado mejorar su imagen dañada por los los múltiples casos de datos sustraídos de la red social y difundidos ampliamente sin ningún aparente control. De todas formas, en mi opinión el combate emprendido por Facebook contra las noticias falsas es interesante pero seguramente no conseguirá el absoluto control de dichas “fake news”. Los ciudadanos tenemos la responsabilidad de no difundir noticias falsas. No se debe compartir o reenviar ninguna información sin contrastarla. A veces difundimos una noticia, o el titular de la misma, por lo viral que pueda ser, pero no leemos todo su contenido, ni la fecha, ni la contrastamos con ninguna otra fuente.
David Lerín Ibarra, colaborador de Tribuna Contact Center