Un call center situado en la localidad argentina de San Miguel de Tucumán ha sufrido numerosos daños a consecuencia de un temporal.
El mal tiempo que azotó ayer Tucumán hizo que cediera parte de la cubierta del centro de llamadas de Atusa S.A, empresa propiedad del gobernador de la provincia, José Alperovich.
Los empleados del call center decidieron abandonar el local para evitar que pudieran ser heridos si se llegaban a caer más trozos del techo.
Lo sorprendete de la situación es que a pesar de que esa decisión era la más lógica dadas las circunstancias, los supervisores del centro de llamadas pretendían que los agentes siguieran trabajando, según recoge el diario Contexto.
Las fuertes lluvias también inundaron parte del local, que está ubicado en Ejército Norte al 700 y según la misma fuente, muestra un estado de precariedad.
Fuentes Empleadas: Contexto